La Fundación Rigoberta Menchú Tum y la Premio Nobel de la Paz condenan los actos del gobierno del Brasil contra el Movimiento Brasileño por la Tierra

2000-11-06 00:00:00

La Premio Nobel de la Paz, Rigoberta Menchú Tum, y la Fundación
que preside denuncian con indignación a la comunidad
internacional los actos violatorios y antidemocráticos en que ha
venido incurriendo el gobierno de Brasil con el afán de golpear
a organizaciones abanderadas en la justa lucha campesina por el
acceso a la tierra, condenando a la miseria a millares de
familias de campesinos al denegarles virtualmente el acceso al
crédito. Una de las muestras evidentes de esta inaceptable
actitud del gobierno de Fernando Henrique Cardoso es el ataque
directo contra los miembros del Movimiento Sin Tierra (MST). En
lo que va de este año, 10 integrantes de esa organización han
sido asesinados, mientras se han entablado procesos criminales
contra 180 líderes del movimiento, en una nueva manifestación de
persecución política.

La premio Nobel y la Fundación condenan también las acciones
gubernamentales de restringir el crédito a los pequeños
agricultores mediante las cuales acaba de condenar a la miseria
a 250 mil familias de labradores, es decir, a más de un millón
de personas. Es inaceptable que gobiernos como el de Henrique
Cardoso insistan en instaurar en su país modelos
antidemocráticos que van en perjuicio de millones de seres
humanos y son contrarios a los esfuerzos por alcanzar una
cultura de paz, donde la equidad y el ejercicio democrático
brinden verdaderas oportunidades de desarrollo a todos los seres
humanos. Denunciamos y condenamos las políticas del gobierno
brasileño, e instamos al presidente Cardoso a corregir el rumbo
de su actuación pública, para que las acciones de su gobierno no
continúen incrementando el hambre y la miseria en Brasil ni
negando oportunidades de desarrollo a los desposeídos.

Asimismo, expresamos nuestra solidaridad al Movimiento Sin
Tierra, víctima de una clara y evidente persecución política por
el gobierno brasileño.

Guatemala, noviembre de 2000