Tres meses tuvieron que permanecer a la altura del kilómetro 114 unos cinco mil campesinos junto a sus familiares amenazando al gobierno con venirse a Managua si no daba señales de cumplir los acuerdos firmados hace tres años, en los que se incluían parcelas familiares, compromisos de titulación de empresas en posesión y la aplicación de políticas de empleo y atención social en la zona.

Al final la realidad triunfó sobre la terquedad de los funcionarios públicos que tuvieron que aceptar su compromiso de darle una solución de largo plazo para que los miles de campesinos de los Municipios del Tuma la Dalia, San Ramón, Rancho Grande y Matagalpa, puedan realmente sumarse a la actividad productiva de la región.

Y a partir del pasado 29 de mayo comenzó a desmovilizarse el primer contingente de campesinos tras que una comisión del Gobierno, representes de la Iglesia Católica, la OEA, EL CENID y gremios conformadas por la Unión Nacional de Productores Asociados(UNAPA) y la Asociación de Trabajadores del Campo(ATC) arribaran a mecanismos razonables de concretización de los acuerdos de la Tunas, estos procedimientos se pueden expresar en los siguientes aspectos.

Desmovilización del setenta por ciento de los campesinos y o ubicación o posicionamiento en 18 propiedades de los cuatro municipios esto significa darle destino a 4 mil trescientos sesenta y dos familias a las que de forma inmediata les entregarían, plásticos y otros avituallamientos para la elaboración de sus champas.

A la vez la entrega inmediata de comida para los meses de junio y julio 2004. Garantía de empleo temporal para los meses de agosto.septiembre y octubre 2004 en la reparación de caminos. Autoconstrucción de sus propias viviendas en las que se verán involucrados instituciones como el I.D-R. F.I.S.E, y la comunidad internacional a través de la OEA entre otras.

Entrega de herramientas y semillas para la siembra de postreras y el apoyo en los periodos de siembras de Apante y Primeras.

Otro aspecto donde se adentraron en acuerdos fue la creación de un fondo para la titulación de las parcelas las que serán tres manzanas por familias, tituladas a nombre de toda la familia, propiedad que no podrá ser vendible, transferible y serán adquirida por los beneficiarios de las Tunas a un precio catastral al momento de ser recibidas, deuda que será saldada hasta en un plazo de 30 años.

En las parcelas serán construidas las viviendas en un plazo no mayor de seis meses calendarizados a partir de estos últimos acuerdos, mediante la forma de autoconstrucción con la mano de obra de los propios beneficiarios y el apoyo económico de las instituciones gubernamentales quienes se encargaran de los movimientos de tierra, retomando la experiencia que tiene la OEA, en este mismo tipo de actividad en apoyo a desmovilizados de la ex - resistencia y los militares retirados del Ejercito Nacional.

Los aspectos anteriores tienen que ver únicamente con los campesinos que exigían parcelas familiares.

Mientras tanto, la comisión garante revisará el cumplimiento de los acuerdos a finales del mes de junio 2004.

El otro aspecto en la concreción de los acuerdos de las Tunas tiene que ver con centenares de campesinos con varios años en la posesión de algunas fincas, donde viven ellos y sus familiares, es lo único que tienen como fuente de ingresos pero requieren de seguridad jurídica. Algunas de estas fincas son.

La Isla de Peñas Blancas, Santa Martha de Guasaca, San Antonio de Guasaca, La Empresa, La Suana, y San José.
El gobierno se comprometió venderlas a sus ocupantes.

Mientras que las fincas, La Rebusca y El Ular también en posesión por colonos y retirados del ejercito y ex resistencia, el gobierno se comprometió a aplicarles reforma agraria.

La finca la Estrella será titulada a favor de los trabajadores, y la hacienda La Golondrina también en manos de campesinos que su propietario es el Estado pero es reclamada por un gringo Caitudo, será permutada es decir los campesinos recibirán una nueva propiedad.

El gobierno también se comprometió a la reparación de las carreteras que comunican a Matagalpa, Sébaco, Matagalpa. La Dalia, Matagalpa – Jinotega. San Ramón el Jobo entre otros.

De acuerdo a lo manifestado por la dirigente de la Asociación Trabajadores del Campo en Matagalpa, Margarita López, el monto de la exigencia de los acuerdos de las Tunas asciende a siete y medio milones de córdobas y se desgloza de la forma siguiente.

En cuatro millones de córdobas para alimentación de emergencia para los miles de campesinos.
Millón y medio de córdobas para localización y compra del banco de tierras.

Un millón para los trámites, medición y titulación de las parcelas a nombre de las familias

Un millón para la entrega inmediata de plásticos y otros gastos de traslados a las parcelas.

Este es un dinero que no saldrá del gobierno de Nicaragua sino de una donación hecha por el Reino de Noruega, para estos fines advirtió finalmente la dirigente Margarita López.