Ayer, 22 de enero, iniciaron las actividades del Foro Social Mundial-México, justo cuando el reloj marcaba las once treinta horas, las campanas de la Catedral de la ciudad de México repicaban el Ángelus y las palomas, miles de palomas volaban para dar la bienvenida a los más de mil ciudadanas/os que acudieron a la inauguración en el Zócalo, corazón de la antigua y grande Tenochtitlan, espacio que recibe a todas las manifestaciones sociales que reclaman un mundo mejor.

Correspondió a Eduardo Correa, de la coordinación del FSM-Méx., dirigir el primer mensaje donde destaca que: “Los días turbulentos y críticos, que hoy vive la patria mexicana para la mayor parte de sus hijos, al igual que muchas otras patrias en el mundo, nos obligan a buscar a nuestros pares y destacar las coincidencias fundamentales de nuestras condiciones de vida, sin trabajo, sin pan y sin tortillas, sin esperanzas ciertas, sin futuro, los millones y millones de mujeres y hombres de todo el mundo sometidos a la humillación y a la ofensa, a la discriminación y a la explotación por parte de unos cuantos depredadores capitalistas, e imperialistas descendientes y herederos de antiguos y nuevos colonizadores, tenemos algo en común: la necesidad de justicia, de liberación, de igualdad y de bienestar compartidos. Nos corresponde encontrar la conciencia y la acción común de miles y millones de mujeres y hombres dispuestos a salvar a la madre tierra”.

Posteriormente se integró el presidium con cada uno de los integrantes de las redes nacionales convocantes del Foro Social Mundial-México, así ocuparon sus asientos Doña Rosario Ibarra de Piedra, el sacerdote Miguel Concha, por los indígenas Adelfo Regino, por los universitarios Oscar Gonzáles, Luis Suárez. Por la red “sin maíz, no hay país”, Jaime Rello por los Pobladores y la Alianza Internacional de Habitantes. Asimismo correspondió a Roció Lombera y al Llanero Solitito conducir el evento.

Ahora bien, recayó en el Jefe de Gobierno de la Ciudad de México otorgar la bienvenida a los asistentes al FSM, quien se dirigió a la sociedad de la manera siguiente: “La ciudad de México los declara huéspedes distinguidos, abre sus brazos la ciudad para todos ustedes, esperando que los esfuerzos de unidad permitan la articulación de todas las redes y de esta manera evitar la dispersión, para que todos juntos desde este Foro Social Mundial-México caminen hacia la construcción de otro mundo posible. El Gobierno de la Ciudad les da la más cálida de las bienvenidas y deseo que los trabajos transcurran con éxito”.
En uso de la voz, Leo Gabriel, a nombre del Comité Internacional del Foro Social Mundial, realiza un apretado resumen desde los orígenes del foro a la fecha, con voz pausada lee los principios rectores del FSM.

Cabe destacar que la primera conferencia magistral la brindó el Doctor Pablo Gonzáles Casanova, en el Foro Central con el tema, “Hacia donde va el capitalismo”. Tres tesis centrales destacan en su discurso. La primera consiste, “en mostrar como la critica al modelo neoliberal, la protesta, las marchas, las consignas, los bloqueos, plantones están en crisis. Por tanto hoy se requiere de la mayor inteligencia y de acciones finas que borden las líneas y estrategias de otro mundo posible. Que partirán de reconocer las experiencias locales exitosas que se multiplican por todo el país y el mundo.

Experiencias que colocan por delante a la humanidad y que construyen las redes para disputar el poder”.
La segunda, sostiene “que la lucha por sí misma contra el neoliberalismo es insuficiente, ya que este modelo se consolidó por el desgaste y derrota de los gobiernos nacionalistas, populistas. Asimismo por la derrota de los frentes populares y sindicales. Hoy, se requiere reconocer que con la tecnociencia, con la tecnoorganización, los sistemas autorregulados lo hacen más complejo y de esta manera restauran la recolonización a partir de la democracia de mercado y la lógica de poder. Hoy el poder capitalista aniquila a millones de hombres y mujeres con sus guerras neocoloniales, que persiguen apoderarse de los bienes de los pueblos del mundo Con esto quiero decir, que ahora es mas complejo derrotar al capitalismo, más no es invencible”.

Y la tercera, “todos los pueblos del mundo tendrán que construir miles de redes para disputar el poder, no es posible aceptar las tesis que plantean que no hay que luchar por el poder, claro que hay que luchar por el poder, desde tres frentes articulados, que implican una triple lucha: por la democracia, por la liberación y por el socialismo del siglo XXI. Ahora es el momento para que los condenados de la tierra, como los nombró Franz. Fanon, o los pobres de la tierra como los denominó José Martí, articulen sus esfuerzos de manera unitaria en amplias redes democráticas y horizontales que construyan el umbral del socialismo del siglo XXI”.