ALBA otorga Condecoración Simón Rodríguez al escritor uruguayo Eduardo Galeano
El presidente venezolano, Nicolás Maduro, otorgó ayer miércoles en Caracas la Condecoración Simón Rodríguez al escritor uruguayo Eduardo Galeano, quien se encuentra de visita en el país.
En las afueras del Palacio de Miraflores, y tras concluir una movilización popular antiimperialista y antifascista, el Jefe de Estado manifestó que la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA), en su Consejo de Ministros de Cultura, decidió entregarle al intelectual un premio especial proveniente del Fondo de Cultura del grupo.
Al recibir la distinción, Galeano expresó: "Es un inmenso honor para mí recibir esta condecoración de Simón Rodríguez, que fue llamado como 'El Loco' Rodríguez, la primera mitad del siglo XIX. Porque este 'loco' fue capaz de hacer la primera revolución educativa de América Latina que está todavía a medio hacer, pero él fue el profeta y el que la puso en práctica durante los años que vivió".
Galeano, nacido en 1940 en Montevideo, Uruguay, es considerado uno de los más destacados escritores de América Latina.
Memorias del fuego (1986) y Las venas abiertas de América Latina (1971) son sus libros más conocidos, traducidos a 20 idiomas.
La Condecoración Simón Rodríguez hace referencia a quien fuera el maestro de El Libertador Simón Bolívar.
Rodríguez le enseñó el valor de la libertad, la importancia de la justicia y el significado de la autodeterminación, siempre insistió en la educación popular como la base del progreso de las naciones e inculcó el pensamiento creativo, el razonamiento científico, el desarrollo tecnológico y la originalidad.
Simón Rodríguez pasó por Estados Unidos y Francia. En París, en 1804, se reencontró con Bolívar y juntos emprendieron un viaje por varios países de Europa. En Roma, en 1805, fue testigo del famoso Juramento de El Libertador, quien en el Monte Sacro anunció que no descansaría hasta lograr la Independencia.
Entre 1806 y 1823, Rodríguez trabajó como maestro en diversas escuelas de Alemania, Prusia, Rusia y Países Bajos. Regresó a América en 1823 e impulsó la fundación de escuelas y talleres en Colombia y Bolivia. Posteriormente trabajó como maestro y escritor en Perú, Chile y Ecuador.
En 1853, junto a su hijo José, se estableció en Amotape, Piura, Perú, donde falleció el 28 de febrero de 1854.
Agencia Venezolana de Noticias