A raíz del asilo a Julián Assange:
Toda la solidaridad con Ecuador frente a las amenazas inglesas
“Nosotros no somos una colonia británica, y los tiempos de las colonias terminaron” afirmó el canciller de Ecuador Ricardo Patiño. Esa frase es tomada en toda Nuestra América como bandera, frente a la amenaza británica de asaltar la embajada ecuatoriana en Londres. El sólo hecho de enunciar la intención de entrar en la representación diplomática por la fuerza, para detener a un refugiado político, ya es una afrenta para nuestros países y pueblos.
La república de Ecuador ha actuado en forma soberana, y atendiendo todas las normativas del derecho internacional, al otorgar el 16 de agosto el asilo político a Julián Assange, fundador de Wikileaks. Y, digan lo que digan en Londres, no les asiste ningún fundamento para avasallar el derecho de asilo.
Desde la Articulación continental de Movimientos Sociales hacia el ALBA apoyamos el pedido de Assange desde un primer momento, a sabiendas del peligro que constituye para su vida una posible deportación a EEUU. Por ello, nos reunimos con el presidente Correa en el mes de Junio en Rio de Janeiro, Brasil, en el marco de la Cumbre de los Pueblos (en Rio+20), manifestándole nuestro apoyo al pedido de éste de asilarse en Ecuador.
En estos momentos, cientos de policías ingleses custodian la puerta de la Embajada de Ecuador en Londres. A través de una carta enviada el pasado miércoles por parte del gobierno inglés, se hacía constar la posibilidad de ingreso al lugar, algo que, de realizarse, constituiría un atentado a la soberanía nacional y una violación de los principios del derecho internacional consagrados en la Carta de las Naciones Unidas, la Convención de Viena sobre relaciones diplomáticas y otros instrumentos internacionales aplicables.
Los Movimientos Sociales hacia el ALBA, Capitulo Argentina, nos solidarizamos con Assange y el gobierno ecuatoriano frente a esta nueva arremetida imperial, que esconde su verdadera finalidad: aportar a una no resolución del conflicto para, finalmente, deportar al fundador de Wikileaks a EEUU, donde podría ser juzgado hasta con pena de muerte.
Movimientos Sociales hacia el ALBA, Capitulo Argentina