Brasil: El primer paso de un proceso de luchas

2009-03-27 00:00:00

Las centrales sindicales y los movimientos sociales involucrados en la construcción de la manifestación en defensa de la clase trabajadora y contra la crisis económica, que tiene lugar el lunes (30/3), demostraron la intención de mantener la unidad contra el desempleo, por la manutención de los derechos, por la reforma agraria y por el cambio en la política económica.
Las entidades saludaron la unidad alrededor del acto contra la crisis, pero evaluaron que ese debe ser el primer paso de una agenda más amplia de luchas y manifestaciones de la clase trabajadora. Se presentó también una serie de propuestas contra la crisis, como iniciativas que impidan despidos masivos, la caída de los intereses y la re-estatización de grandes empresas.
“Necesitamos inmediatamente montar con ese conjunto de fuerzas un comando de lucha”, propuso João Paulo Rodrigues, de la coordinación nacional del MST.  Según él, los procesos de movilización deben continuar después de la manifestación de la próxima semana.  “Soñamos que el 1º Mayo se vuelva, de hecho, un día de lucha de los trabajadores”, afirmó.
Nivaldo Santana, vicepresidente de la CTB (Central de Trabajadoras y Trabajadores de Brasil), evalúa que en el contexto de la crisis “es estratégica la unidad de las centrales sindicales y de los movimientos sociales”.  Para él, la agenda que une a las fuerzas sociales es un nuevo proyecto de desarrollo, para que los trabajadores consigan enfrentar la disputa política en la sociedad alrededor de la crisis.
“Los actos del día 30 pueden ser un punto de partida para una paralización nacional en el próximo periodo”, apuesta Luiz Carlos Prates, el Mancha, de la Conlutas.  Para él, además del acto, hay que hacer un proceso de paralizaciones de los trabajadores y movilizaciones contra el desempleo.  “Conseguimos una cosa inédita: unir todas las centrales sindicales, movimientos sociales y partidos ligados a los trabajadores en ese acto contra el desempleo y contra la crisis”, dijo el presidente de la Fuerza Sindical, el diputado federal Paulo Pereira da Silva (PDT).
“No podemos retroceder respecto a las banderas históricas de la clase trabajadora”, defiende el integrante de la coordinación nacional de la Intersindical, Pedro Paulo.  “No vamos a aceptar la presión para la reducción de salarios para no perder el empleo”.  Para él, la manifestación del día 30 demuestra que “la clase trabajadora está en lucha, mientras los capitalistas están en crisis”.
Ubiraci Dantas de Oliveira, de la CGTB (Central General de los Trabajadores de Brasil), destacó que es un movimiento de carácter nacional, con manifestaciones previstas en todas las capitales del país.  Según él, “estamos luchando por la reducción del tipo de interés, que traba nuestro desarrollo”.
 
Propuestas
Ya fueron cerrados 730 mil puestos de trabajados entre octubre de 2008 y febrero de este año, según dados del Caged (Catastro General de Empleados y Desempleados).  Datos de investigación de empleo y desempleo (Seade/Dieese) señalan que el desempleo subió de 12,7% en diciembre a 13,1% en enero en las seis principales capitales y regiones metropolitanas.  En total, la población desocupada alcanzó 2,62 millones de trabajadores.
João Paulo, dirigente del MST, defendió también la estatización de las empresas del agronegocio que recibieron inversiones del gobierno y están despidiendo trabajadores.  “Queremos que la bandera por la re-estatización de la Embraer alcance también a las empresas del agronegocio, que están quebrando”.
“Nuestra preocupación primera es la manutención de los puestos de trabajo”, afirmó Antonio Carlos Spis, de la dirección de la CUT (Central Única de los Trabajadores).  Criticó el despido masivo por empresas que reciben apoyo del gobierno y tuvieron un lucro enorme en los últimos años, como la Embraer, la Vale do Río Doce y la CSN.  Como forma para impedir el aumento del desempleo, defendió la adhesión de Brasil a la Convención 158 de la OIT (Organización Internacional del Trabajo), que garantiza el empleo contra el despido inmotivado.
Mancha analiza que “no hay motivos para los despidos”, siendo que las grandes empresas han tenido grandes ganancias.  Por ello, Conlutas defiende la aprobación de un proyecto de ley de protección al empleo, que impida los despidos masivos.  El proyecto está siendo construido por la Anamatra (Asociación Nacional de los Magistrados Laborales).
“La bandera por la reintegración de los empleos en la Embraer forma parte de esa lucha”, afirma Mancha.  La empresa fabricante de aviones despidió más de 4.200 personas en febrero, lo que representa cerca del 20% del efectivo de 21.362 empleados.  La Justicia del Trabajo consideró abusivos los despidos y determinó que la empresa pague indemnización a los funcionarios despedidos.
 
Acto contra la crisis
El lunes (30/03), el MST participa de las manifestaciones en defensa de la clase trabajadora y contra la crisis económica mundial, junto a las entidades más representativas del movimiento sindical, estudiantil y popular.  Los actos contra la crisis, que habían sido discutidos en el Foro Social Mundial, deben realizarse en todas las capitales del país.  Están previstas manifestaciones entre 28 de marzo y 4 de abril en todo el mundo.
En São Paulo, el Acto Internacional Unificado contra la Crisis, convocado por más de 20 organizaciones, estará marcado por una marcha en la Avenida Paulista hasta el centro de la ciudad.  La concentración de la marcha empieza a las 10 horas, frente a la Fiesp (Federación de las Industrias del Estado de São Paulo).
“La manifestación representa un paso importante para reconstruir la unidad de la izquierda y reiniciar un proceso de luchas de toda la clase trabajadora contra los bancos, el capital financiero y las empresas transnacionales, que son responsables por la crisis”, afirma el integrante de la coordinación nacional del MST, João Paulo Rodrigues.
Antonio Carlos Spis, de la dirección de la CUT (Central Única de los Trabajadores), evalúa que “es fundamental unir fuerzas y salir a las calles para decir que los trabajadores y trabajadoras no van a pagar por la crisis”.  Según él, a pesar de las dificultades para hacer actividades unitarias de las fuerzas de izquierda, la manifestación contra la crisis cuenta con un amplio abanico de entidades, desde Conlutas hasta la Fuerza Sindical.
“Nuestra manifestación es para presionar al gobierno y el sector empresarial, que aprovechan la crisis para despedir a fin de garantizar sus ganancias, aumentando los problemas sociales”, afirmó Carlos Rogério Nunes, de la dirección de la CTB (Central de Trabajadoras y Trabajadores de Brasil).  “Esperamos una agenda que prosiga con la unidad de las fuerzas después del día 30”, acotó.
"Es hora de derrotar las tesis neoliberales, que dieron al mercado la supremacía sobre la vida y el desarrollo nacional autónomo en este País.  Por eso, los movimientos sociales y populares - iglesia, MST y centrales sindicales - van a las calles de manera unificada", defiende el diputado federal Ivan Valente (PSOL).
 
Reforma Agraria
Una de las palabras de orden del acto es “Reforma Agraria Ya”, que aparece con fuerza como una alternativa para la crisis económica, para garantizar la producción de alimentos y materia prima para la industria, fortaleciendo el mercado interno y promoviendo justicia social.  “La Reforma Agraria es una alternativa para la crisis porque garantiza trabajo, educación y vivienda a la población del campo.  Tenemos que asentar las familias acampadas y hacer un programa de agroindustrias para fortalecer la producción y garantizar ingresos a las familias”, afirma João Paulo.
“No hay salida para nuestro país sin Reforma Agraria.  Es una gran equivocación del gobierno Lula no haber dado un paso concreto para colocarla en la agenda”, evalúa Spis.  “La democratización de la tierra puede garantizar una verdadera inclusión social, garantizando trabajo y producción”, señala.
Rogério Nunes denunció que hay una “visión social errada” en la agricultura, que es dominada por el agronegocio y por grandes empresas.  La crisis económica golpeó de lleno al agronegocio, demostrando la insustentabilidad de ese modelo.  Sólo en diciembre, el agronegocio despidió 134 mil personas en todo país, siendo el segundo sector que más despidió con la crisis económica, a pesar de las grandes ganancias registradas en el último periodo y las inversiones del gobierno.