La CGTB expresa su firme condena al golpe de Estado que depuso el presidente Fernando Lugo, nueve meses antes de vencer el mandato que le otorgó el pueblo paraguayo, en abril de 2008, en elecciones limpias y democráticas. Manifiesta total solidaridad y apoyo a los trabajadores paraguayos y a su lucha contra esa sórdida tentativa de retroceder en los avances conquistados, permanentemente boicoteados por las multinacionales y los latifundistas.
 
Valiéndose del poder económico de corporaciones como la Monsanto y la Cargill, sustentadas por los medios pro-imperialista, con base en un rito sumario, golpista, sin derecho a la defensa, fue armado un "juicio" en el parlamento, sin pruebas, sin siquiera la preocupación de presentar un crimen, una contravención, un irrespeto a las leyes del país. A partir de la conmoción generada por el masacre, ocurrido el viernes (15), de dos decenas de campesinos y policiales, durante la desocupación de una hacienda en Curuguaty, 250 km al noreste de Asunción, el presidente Lugo - que no tuvo ninguna responsabilidad en el terrible episodio - fue acusado por un supuesto "débil desempeño de sus funciones". La hacienda en cuestión es propiedad usurpada por un ex-senador del Partido Colorado, que posee miles de hectáreas más donadas a su familia por el dictador Stroessner.
 
Los trabajadores, el pueblo y el gobierno legítimo del Paraguai no están solos. Toda América Latina, liderada por el Mercosur y la Unasur, está unida contra el golpe y apuntando claramente a los patrocinadores de esa iniciativa de injerencia en el continente: los Estados Unidos de América.
 
Por el retorno inmediato del presidente Fernando Lugo al Palacio de López, sede del gobierno en Asunción!
 
Por la reforma agraria amplia y democrática!
 
Por un Paraguay desarrollado, democrático y libre!
 
Por la integración justa, solidaria y profunda de los países y pueblos del Mercosur y de la Unasur!
 
María Pimentel
Secretaria de Relaciones Internacionales de la CGTB