Pronunciamiento del Encuentro centroamericano sobre negociaciones climáticas con énfasis en pérdidas y daños, y legislación frente al cambio climático

2014-04-14 21:00:00

 

Delegados  y  delegadas  de  redes  de  organizaciones  sociales,  populares  campesinas, pueblos originarios, comunitarias, iglesias, jóvenes, feministas, ambientalistas, académicas, y ongs nacionales e internacionales provenientes de Guatemala, Honduras, Nicaragua, El Salvador y Costa Rica; con el acompañamiento solidario de compañeros y compañeras de Filipinas, Holanda, Alemania, Australia, Suecia, Bolivia, Perú y Estados Unidos; reunidos en el  Encuentro centroamericano  sobre  negociaciones   climáticas  con  énfasis  en pérdidas y daños, y legislación frente al cambio climático, desarrollado en San Salvador los días 04 y 05 de abril del 2014.

 

CONSIDERANDO QUE:

 

1.  Hasta la fecha el objetivo de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio  Climático  CMNUCC - articulo 2.3 -,  de lograr la estabilización de las concentraciones de gases de efecto invernadero en la atmósfera, a  un nivel que impida  interferencias  humanas  peligrosas  en  el  sistema  climático,  en  un  plazo suficiente para permitir que los ecosistemas se  adapten naturalmente al cambio climático, asegurar que la producción de alimentos no se vea  amenazada y permitir que el desarrollo económico prosiga de manera sostenible, ha fracasado.

 

2.  La temperatura media del planeta ha aumentado alrededor de 0.8˚C en los últimos 150 años. Procesos de desarrollo lento como el aumento del nivel del mar y algunos eventos extremos (olas de calor, fuertes precipitaciones y huracanes) que provocan grandes desastres, están  ocurriendo con mayor frecuencia y afectando de manera inclemente a países y poblaciones más vulnerables, quienes son menos responsables del cambio climático.

 

3.  El Quinto informe del Panel Intergubernamental de Cambio Climático - IPCC – de 2013-2014, establece que de continuar el ritmo de emisiones actuales, para el año 2030  la  temperatura  promedio  global  alcanzaría  niveles  mayores  de  1.5  ˚C, afectando  todas  las  formas  de  vida  del  planeta  con  énfasis  en  regiones  más vulnerables como Centroamérica.

 

4.  Hasta la fecha, las negociaciones en el marco de la CMNUCC no han posibilitado acuerdos sustanciales con respecto a la solución real de la crisis climática que el planeta enfrenta, dicha  situación ha ocasionado que los procesos de mitigación y adaptación hayan fracasado, por no contar con mecanismos ni recursos claros para su implementación, en razón de la falta de  compromiso y apoyo de los países industrializados presionados por grandes corporaciones, haciendo más frecuentes y crecientes las perdidas y daños provocadas por el cambio climático  en  nuestros países.

 

5.  El Buen Vivir es un paradigma que se consolida como alternativa en el marco de la Justicia Climática, rescata la armonía de los seres humanos con la naturaleza y la eleva como sujeta poseedora de derechos, fortalece la vida comunitaria, promueve la  economía  solidaria,  la  seguridad  y  soberanía  alimentaria,  la  autosuficiencia hídrica, la producción y consumo responsable, fomenta las prácticas y defensas de los pueblos originarios a partir de conocimientos ancestrales, abriendo la transición hacia una Nueva era solar.

 

Ante esta acuciante realidad, demandamos:

 

-Soluciones sustentables reales in situ en las negociaciones internacionales del clima en el marco de la CMNUCC, con compromisos vinculantes que permitan estabilizar el incremento de la temperatura  por debajo de 1.5 ºC, lo que implica la reducción de emisiones de los países desarrollados de un 50% al 2020 y 95% al 2050.

 

-A los gobiernos Centroamericanos el establecimiento y aplicación de políticas públicas basadas en el Buen Vivir y sistemas alternativos al neoliberalismo, que consideren el mejoramiento de la calidad de vida,  el ejercicio y goce de derechos de los pueblos y el reconocimiento de los derechos de nuestra Madre Tierra, así como la incorporación de las prioridades  estratégicas  de  los  pueblos  en  defensa  de  los  territorios  como  el Derecho humano al agua, la soberanía alimentaria, servicios energéticos, y los medios de vida.

 

-El reconocimiento de la Deuda climática y el establecimiento de compromisos claros dentro del  marco de la Convención y el recién creado Mecanismo Internacional de Varsovia,  incluyendo  los   ejes  de  financiamiento,  transferencia  de  tecnología  y construcción  de  capacidades  nacionales  para  el  desarrollo  de  procesos  serios  en mitigación y adaptación de manera urgente, y para abordar las pérdidas y daños por el cambio climático; y construir estrategias de implementación de acciones  climáticas prioritarias,  bajo  el  principio  de  responsabilidades  comunes  diferenciadas  como elementos claves de las negociaciones climáticas.

 

-El establecimiento de procesos de articulación como países vulnerables bajo una visión  común  y   actuación  unificada.  Insistimos  que  el  Sistema  de  Integración Centroamericano  (SICA)  por  medio  de  su  Secretaria  General,  y  en  especial  sus comisiones de ambiente y desarrollo –CCAD-, y del Centro de prevención de desastres – CEPREDENAC-, debe  funcionar  como  un  sujeto  negociador  efectivo  en  estos procesos internacionales que tenga como base  una estrategia de consulta sobre los planteamientos de organismos de la sociedad civil vinculados al tema.

 

-Como países seriamente impactados, exigimos que el Mecanismo Internacional de Varsovia de Pérdidas y Daños sea un instrumento eficiente que se ponga al servicio de la justicia climática; que debe incluirse en los procesos de discusión y negociación de la próxima COP 20 en Perú, y ser incorporado en el próximo acuerdo climático a lograrse en la COP 21 de París, en el año 2015, como una línea  de trabajo prioritaria con financiamiento especifico fuera del Marco de Adaptación.

 

-La  Construcción  y  el  establecimiento  inmediato  de  mecanismos  de  monitoreo  y evaluación que  proporcionen información precisa de las  pérdidas y daños en los bienes naturales y medios de  vida  de nuestros países, así como las estrategias y planes requeridos para su abordaje y financiamiento dentro del Mecanismo de Varsovia de Pérdidas y Daños que no genere nueva deuda, ni uso de fondos tradicionales de ayuda al desarrollo.

 

-Creación, revisión y reforma de instrumentos jurídicos  a nivel nacional basado en la Estrategia  y  Política  regional  de  cambio  climático  en  el  marco  del  Sistema  de Integración Centroamericana,  que responda a las realidades de cada país y de la región, y a un esquema de justicia climática legalmente vinculante.

 

-Crear  un  Tribunal  Regional  de  Justicia  Ambiental  en  el  seno  del  Sistema  de Integración Centroamericana que garantice el cumplimiento  de los marcos legales de ambiente y clima a nivel regional, con participación de la sociedad civil.

 

 

San Salvador, El Salvador, 04 y 05 de abril de 2014

 

 

¡Los pueblos centroamericanos exigimos Justicia Climática Ya!.