Foro Andino

Manifiesto de las Organizaciones Campesinas, Indígenas y Afrodescendientes contra el ALCA

2002-04-19 00:00:00

FORO ANDINO
* CLOC - REGION ANDINA: FENOCIN, CCP, CONFEUNASSC, ANUC-UR, FENSUAGRO,
CNA; FMC “Bartolina Sisa”
* CONAIE y CIOEC

¡¡ OTRA AGRICULTURA, OTRA INTEGRACIÓN, OTRA AMÉRICA; SI ES POSIBLE !!

Ciento veintitrés (123) dirigentes (as) indígenas, campesinos y afro
descendientes de los países de Ecuador, Colombia, Perú y Bolivia; 20
instituciones de desarrollo y ecologistas, integrantes de la Región
Andina, con la participación de productores de México, Argentina,
Uruguay y Francia; nos reunimos en Quito entre el 15 y el 17 de abril,
para salir en defensa de la vida y el desarrollo de los pueblos;
manifestamos lo siguiente:

Los pueblos indígenas, agrarios, afrodescendientes y de América,
estamos viviendo el anticipo del ALCA: el consenso de Washington, las
políticas de ajuste y de reformas estructurales

1.. Desde la década pasada, a través de las llamadas Cumbres de las
Américas y en medio del actual proceso de globalización neoliberal,
los diferentes gobiernos de los Estados Unidos de Norteamérica, vienen
impulsando con agresividad el proyecto ALCA, el cual constituye un
proyecto recolonizador y de anexión de América Latina a los intereses
de la principal potencia imperial del mundo y a los poderosos
intereses económicos de las grandes empresas transnacionales.

2.. En realidad el ALCA es parte y continuidad de una escalada
neoliberal que implementa el gobierno de los EE.UU. desde hace mas de
dos décadas, cuyos hitos más saltantes se han expresado en el llamado
Consenso de Washington y en la imposición de las orientaciones y
reglas comerciales de la OMC, donde lo mas destacado es el hecho que
los países pobres y de mediano desarrollo han perdido importantes
grados de autonomía para implementar políticas en función de sus
propios objetivos e intereses.

Para la implementación de estas políticas sé ha requerido del concurso
del FMI, que a través de sus políticas de ajuste y de reformas
estructurales, que en los últimos años se implementan bajo una nueva
careta: los programas para la reducción y los alivio de la pobreza,
prefigurando y diseñando en nuestros países economías basadas en
mercados abiertos al comercio exterior y a la inversión extranjera, es
decir, en economías de fronteras abiertas.

Los pueblos agrarios e indígenas de América en especial de América
Latina, hemos sido testigos de los impactos negativos de estas
políticas devastadoras del progreso y bienestar de nuestros países,
naciones y pueblos, a tal punto que la propia Conferencia de las
Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo ha manifestado:

“El sistema mundial se caracteriza por asimetrías de
desequilibrios que desfavorecen a los pobres y a los excluidos....Una
competencia desenfrenada, en particular cuando las armas son
desiguales, jamás ha sido suficiente para activar el crecimiento ni
para incrementar la prosperidad.” (CNUCED.1999)

EL ALCA ES TAMBIÉN UN INSTRUMENTO DE CONTROL GEOPOLÍTICO Y
SOCIAL DE LA POTENCIA MÁS PODEROSA DEL MUNDO

3.. El ALCA surgió en un clima de triunfalismo al inicio de la década
de los años 90, cuando la superpotencia norteamericana parecía
omnipotente frente a las débiles, desarticuladas y endeudadas
economías latinoamericanas. Pero la década comenzó y continuo
transcurriendo con la mezcla contradictoria del triunfalismo verbal y
sucesivas crisis económicas en países desarrollados y sub
desarrollados que indicaban una tendencia hacia desórdenes mayores y
profundos.

4.. En el actual contexto internacional el ALCA no es un proyecto
aislado sino que viene acompañado de otros instrumentos como el Plan
Colombia, la Iniciativa Andina, el Plan Dignidad de Bolivia o el Plan
Puebla de Panamá. Ellos buscan no solo reiterar la subordinación de
Latinoamérica a las necesidades y prioridades del neoliberalismo
norteamericano, sino que esta vez tiene el ingrediente de buscar
integrarnos a los planes estratégicos militares de los Estados Unidos.

Pero sus finalidades no se quedan ahí, por que el ALCA, es parte de
una estrategia de control de mercados, que pretende también ser usada
por EE.UU., como un espacio de acumulación para consolidar su
hegemonía y hacer frente a las contradicciones que tiene con otras
potencias capitalistas, tanto en el terreno político, económico,
comercial y militar.

5.. Estas necesidades de control mundial y en especial de América
Central y del Sur, se acrecientan si tomamos en consideración que el
neoliberalismo ha comenzado a trastrabillar como resultado de un
conjunto de crisis que han ocurrido en los últimos años como es el
caso de la crisis Mexicana, Asiática, Rusa, Brasilera, Argentina y que
incluye la propia recesión económica del ultimo año de los EE.UU.

Pero sobretodo es la respuesta a la lucha de los pueblos indígenas y
campesinos del Ecuador que en su jornada histórica del 21 de enero
desalojaron del poder a Mahuad; las luchas del pueblo peruano que con
la Marcha histórica de los 4 Suyos, expulsó del poder a la mafia
fujimontesinista; las luchas del movimiento campesino y popular de
Bolivia que con bloqueos y marchas han puesto en jaque a la clase
dominante de este país; las luchas del pueblo colombiano por la vida y
por la paz. No menos importante son las luchas del pueblo argentino
que ha puesto en salmuera los postulados del FMI..

Es decir, en América Latina, la crisis del neoliberalismo y las
movilizaciones sociales han abierto un cuadro de inestabilidad y de
creciente ingobernabilidad, tanto en el Eje Andino como en el
MERCOSUR. Estos hechos han demandado el desarrollo de una
contraofensiva de parte de EE.UU., para imponer el ALCA. Por estas
mismas razones están afanados en bloquear los procesos de integración
que los pueblos estamos interesados en potenciar para ubicarnos en la
senda del Progreso, Bienestar y Justicia; así como para negociar en
mejores condiciones con los países desarrollados.

6.. Después del 11 de setiembre el gobierno de EE.UU. con la
administración de Bush, no solo expande la guerra a escala planetaria,
sino que se ha convertido en uno de los regímenes mas genocidas que
registra la historia de la humanidad, al agredir con ventaja y
alevosía al pueblo de Afganistán y amparar la política genocida contra
el pueblo palestino realizado por el sionismo israelí, que hace
recordar al mundo la masacre que el propio pueblo judío sufrió en
manos del fascismo nazi.

7.. Como parte de estos planes en América Latina y el Caribe ha
redoblado su plan de dominio geopolítico buscando desestabilizar
temerariamente la revolución Cubana y jaquear y bloquear a los pueblos
y gobiernos que han comenzado distanciarse de sus planes económicos,
políticos y militares. Así lo demuestra el Plan Colombia con el
pretexto de combatir el narcotráfico y el terrorismo ha profundizado
la guerra interna contra los esfuerzos y paz y salida política
negociada.

Así mismo. es parte de esta misma ofensiva, la visita relámpago al
Perú, ofreciendo el mendrugo del APTA (Ley de preferencias
arancelarias Andinas) a cambio de convertirlo en peón de su política
de agresión a Cuba y de control territorial de América del Sur; y
recientemente el fracasado intento de destruir el Estado de Derecho y
el orden Constitucional en Venezuela; respaldando el golpe de estado
de la derecha empresarial. En ese sentido, respaldamos la voz y
acción de la inmensa mayoría del pueblo de Venezuela que ha restituido
la democracia y la dignidad de este hermano país.

EL ALCA PROFUNDIZARÁ LA MARGINACIÓN Y LA EXCLUSIÓN DE LA
AGRICULTURA Y DE LOS PUEBLOS INDÍGENAS, AGRARIOS Y AFRODESCENDIENTES.

8.. Para las organizaciones del campo de América Latina, la
implementación del ALCA, no será sino la reiteración de los impactos
negativos de las políticas del Consenso de Washington y de la OMC, con
la agravante que será a mayor escala, que implicará:

(a) Una mayor marginación y exclusión de las economías campesinas y/o
de las agriculturas familiares de los mercados; y que al mismo tiempo
destruye la agricultura como fuente de generación de trabajo y de
progreso para las poblaciones rurales que contribuyan alcanzar el
bienestar de nuestros países.

Ello se produce aún cuando la pequeña producción es el soporte de la
seguridad alimentaria de nuestros pueblos, de la vida, de la
preservación de nuestros ecosistemas y de nuestra cultura. Para los
pueblos indígenas, agrarios y Afrodescendientes el ALCA no será sino
el sometimiento a un supuesto libre mercado de sus formas de
organización y también de sus culturas.

(b) Se ha profundizado los desplazamientos forzosos que no sólo
amplían el despoblamiento rural, sino que además de producir la
pérdida de identidad, desarraigo cultural y pérdida de los medios
productivos expulsa a ciento de miles de ciudadanos de nuestros
países, que han pasado a engrosar las filas de mano de obra barata en
los países desarrollados y son considerados como ciudadanos de tercera
clase.

(c) La imposición de patrones de consumo homogenizantes en base a los
Alimentos importados desde el principal granero del mundo que son los
Estados Unidos, atentando a la Soberanía y Seguridad Alimentaria de
nuestros países y pueblos;

(d) El ALCA, como expresión de planes geopolíticos, también constituye
la potencial amenaza de deterioro y destrucción del medio ambiente, de
nuestros recursos naturales como tierras, bosques y aguas, sustento de
nuestra producción agropecuaria; es decir, de la biodiversidad que se
deposita en suelos y montañas de América Latina, entre ellos la que se
ha cultivado y se ha preservado por acción de nuestros pueblos
indígenas y agrarios de la Cordillera de los Andes.

(e) El ALCA al tener como sustento el modelo neoliberal también pasará
a desnacionalizar y privatizar el agua, los bosques, la tierra y
recursos genéticos que posee la montaña Andina, para beneficiar a
minorías intermediarias y transnacionales generando mas desocupación y
exclusión.

(f) Como parte de este proceso ha abierto un conflicto entre las
grandes empresas mineras y de hidrocarburos, afectando el territorio
de nuestras históricas comunidades campesinas, de nuestros pueblos
indígenas y de los productores agrarios en general, al punto de
generar enormes perdidas a través de compras devaluadas y remates
forzados por la banca privada.

(g) El agravamiento de las condiciones de pobreza y extrema pobreza de
nuestras poblaciones en particular de aquella que se asienta en los
ámbitos rurales de nuestros países.

TEJIENDO ALTERNATIVAS

Las organizaciones asistentes al Foro Andino consideramos
indispensable formular las siguientes alternativas para construir
alianzas estratégicas de los actores del campo y la ciudad.

9.. PROPUESTAS INMEDIATAS.

Para enfrentar el corto así como el mediano plazo, que al mismo tiempo
nos permita acopiar fuerzas para las orientaciones de largo plazo y en
la lucha contra la profundización de las casi perfectas asimetrías que
auspicia la OMC, es necesario relevar en primer plano y reivindicar lo
siguiente:

* Protección de las prácticas agrícolas sustentables de
autoabastecimiento, a través del control comunitario y ancestral de
las semillas nativas y la recuperación del conocimiento ancestral;
fundamentos de la soberanía alimentaria de nuestros pueblos y
naciones.

* Incorporación de la tierra como patrimonio cultural, base de la vida
y no como una simple mercancía, reivindicando la tierra, el territorio
y la interculturalidad. Todo ello implica el desarrollo de una nueva
reforma agraria integral.

* Defensa y promoción de los ecosistemas de los países andinos, en
tanto que son depositarios de una de las más ricas biodiversidades que
existen en el mundo, implementando políticas agro ecológicas y de
gestión de microcuencas.

* El agua es un elemento vital y básico para el sostenimiento de la
vida por lo tanto es un derecho fundamental que debe estar garantizado
en cantidad y calidad para toda la población; por tanto debe
mantenerse su accesibilidad mediante la entrega como servicio público
bajo ninguna forma de privatización.

* En tanto la deuda externa está pagada por nuestros países y es
éticamente inmoral cobrarla, planteamos que los recursos destinados al
pago de la deuda sean invertidos para el desarrollo de nuestros
pueblos y por ello rechazamos que estos recursos sean destinados para
estrategias militares y para fortalecer a los grupos dominantes que
existen en nuestros países.

* Respeto sistemático al principio de la precaución para la salud, la
alimentación y el medio ambiente.

* El rechazo de todo dumping económico y social, en particular el que
organiza de manera sofisticada la OMC.

* Organizar y promover las consultas populares para ejercer nuestro
derecho a voz y decisión de las organizaciones del campo para plantear
nuestras alternativas.

10.. CONSTRUIR UNA NUEVA COMPETITIVIDAD BASADA EN LA EQUIDAD Y LOS
MISMO DERECHOS.

En tanto que la competitividad entre las agriculturas de los países
marginados y excluidos y las agriculturas de los países ricos; está
determinada por los presupuestos públicos destinados y por las
políticas de ayuda a la producción interna y las exportaciones que los
países ricos otorgan a sus respectivas agriculturas; debemos plantear
que los productores y campesinos de los países en desarrollo, queremos
producir con los mismos derechos.

Necesitamos generar condiciones de equidad, justicia e igualdad
para competir entre iguales, con mercados regulados, con precios
justos y estabilidad; lo cual significa que tengamos las mismas
prerrogativas que tienen los países ricos y sus respectivas
agriculturas.

Todo ello implica nuevas políticas macroeconómicas nacidas de una
nueva política económica, que pone como centro el desarrollo de
nuestros mercados internos, que contribuyan a la descentralización y
reforma del Estado que se atienda los principales derechos de la
población e impulse el progreso y bienestar de nuestros pueblos.

En el marco de esta nueva política económica se debe impulsar
políticas diferenciadas para la pequeña agricultura o la agricultura
familiar que está destinada a incrementar la soberanía y seguridad
alimentaria de los pueblos, a proteger el empleo rural y combatir la
pobreza; en contraposición de aquellos subsidios que están orientados
a las empresas transnacionales, que provocan una sobre producción
crónica, el dumping y a la distorsión de los precios internacionales.

11.. PLANTEAR, LA MORATORIA SOBRE TODA NUEVA NEGOCIACIÓN EN LA
OMC, pues sus reglas y prácticas han propiciado y profundizado la
desigualdad, la exclusión y marginación social, en el mundo.

En el ámbito agrícola, estas mismas reglas de la OMC han desembocado
en una competencia desigual y desleal, que han traído como resultado
la creciente política de destrucción de la agricultura familiar, en
especial la campesina que se mueve en los marcos de la sobre vivencia.

12.. La agricultura por ser parte sustancial de la vida y patrimonio
de los pueblos y naciones; requiere de nuevas condiciones basadas en
la equidad y la justicia; para devolverle su carácter multifuncional
al estar directamente vinculada con la soberanía y seguridad
alimentaria de los pueblos, la protección de los recursos naturales
del medio ambiente y con el bienestar de sus propios productores.
Por tanto, sostenemos que la agricultura no debe estar considerada
en las negociaciones de la OMC.

Otra agricultura sí es posible construir, siempre y cuando sepamos
también recoger de manera diferenciada, la visión y los intereses de
la agricultura campesina y/o familiar con enfoque de género y
generacional; así como su conocimiento ancestral, entrelazándolos con
las nuevas tecnologías que preservan y defienden la vida.

13.. Para alcanzar estas nuevas condiciones, es necesario tomar en
consideración que aquellas políticas que pretendan encerrarse en sus
propias fronteras, son limitantes, poco viables y tienen escasas
posibilidades de éxito, ante el intenso proceso de globalización que
vivimos. Pero, por otro lado, tampoco tiene suficiente asidero
proponer procesos multilaterales que no se basen en prioridades ni en
la búsqueda de alianzas estratégicas entre los pueblos y naciones.

Desde esta perceptiva, para nosotros es fundamental avanzar en la
integración regional de las Naciones Andinas, en la medida, que además
de habitar en una misma montaña, tenemos razones económicas, sociales,
culturales e históricas, que nos unen.

En este proceso de integración, la agricultura juega un rol
fundamental y dentro de ella, hay la necesidad de impulsar políticas
diferenciadas que tengan como finalidad defender a la pequeña
producción y a los pobres de la sociedad rural.

14.. Nuestras demandas, las enarbolamos amparados en la
Declaración de Universal de los Derechos Humanos de la ONU
firmada en 1948, en el Pacto Internacional relativo a los DESC
firmado en 1966, los cuales estipulan que en ningún caso “un pueblo
podría ser privado de sus medios de subsistencia”; en la Carta de
los Derechos y Deberes Económicos de los Estados de las Naciones
Unidas, firmada en 1974 y que señala que “cada nación tiene el
derecho inalienable de reglamentar las inversiones extranjeras y
ejercer su control sobre las inversiones”.

En este mismo sentido, los ciudadanos, ciudadanas y los pueblos así
como los Estados debemos reafirmarnos en las iniciativas de la ONU,
entre ellas, en la conferencia sobre el Medio Ambiente y
Desarrollo realizada en Río de Janeiro; en la conferencia sobre
Desarrollo Social, realizada en Copenhague; en la conferencia
sobre Seguridad Alimentaria realizada en Roma; así como en las
convenciones de base de la Organización Internacional del Trabajo
(OIT).

GLOBALICEMOS LA ESPERANZA, LA SOLIDARIDAD Y LA
LUCHA

15.. Ante esta difícil y compleja situación que vivimos, los pueblos
de América y del Mundo nos hemos lanzado a buscar las rutas, que nos
permitan globalizar la esperanza y la solidaridad. Entre ellas
destacan los movimientos de Seattle, de Praga, de Génova, el Foro
Mundial de Soberanía Alimentaria realizado en la Habana.

Todos estos esfuerzos han comenzado a cristalizarse durante el primer
(2001) y segundo (2002) Foro Social mundial realizados ambos en Porto
Alegre- Brasil, que han reunido a las fuerzas populares, democráticas,
campesinas, indígenas y a todos aquellos sectores que luchamos por un
mundo más libre, digno, justo y solidario.

16.. En estos mismos foros, precedidos de la orientación de que otro
mundo es posible, hemos venido analizando el denominado proyecto ALCA
y hemos acordado desarrollar acciones para frenar este nuevo intento
de recolonización de la potencia imperial norteamericana; así como
formulando propuestas alternativas que se orienten a fortalecer
nuestra integración regional, principalmente, nuestra Comunidad Andina
de Naciones, CAN.

17.. Los participantes en este Foro, nos reafirmamos en que el ALCA
es una opción ABSOLUTAMENTE INACEPTABLE para nuestras naciones;
demandamos a los gobiernos que asuman su responsabilidad en la
definición de políticas nacionales de desarrollo económico que
promuevan bienestar y desarroll